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ÉTICA CRISTIANA.

Published on Nov 18, 2015

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PRESENTATION OUTLINE


ÉTICA CRISTIANA.
El Cristiano y la Política.

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El deber cristianó frente al estado.
El Nuevo Testamento enseña claramente que el cristiano tiene un deber frente al estado, este es el punto central de la enseñanza de Jesús. Mar.12:13-17, sobre el pago de impuestos a Roma. Este pasaje aclara que la obligación hacia el estado, surge de ser miembro del estado.

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SER MIEMBRO DEL ESTADO.
El apóstol Pablo explica el argumento de Jesús en Rom.13:1-7; el cristiano debe someterse al gobierno porque Dios lo establece, ningún gobernador, presidente, primer ministro ó tirano tiene un poder que no haya sido primeramente venido de Dios.
En 1Tim. 2:1-2 se instruye al creyente a orar por las autoridades del gobierno, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad.
Como dice Cranfield; que Dios desea la presencia del estado para promover La paz y la tranquilidad para que de alguna manera ayude a conducir a la salvación.

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LA RESPONSABILIDAD CRISTIANA HACIA EL ESTADO.
El hecho de que los cristianos tengamos una obligación para con el estado está claro; pero en qué consiste exactamente esa obligación? Primero: el creyente le debe respeto al estado, Rom. 13:7 y 1 P. 2:17; aconseja a los cristianos a honrar y respetar los miembros del gobierno como ministros de Dios. Ordenados por Él y responsables a Él para cumplir su propósito solemne de promover la justicia y castigar el mal.

EL CREYENTE DEBE MANTENERSE INFORMADO.
Como sea posible acerca de asuntos políticos, por ejemplo viendo revistas con noticias, ver con criterio las noticias en la televisión y luego conversar con amigos acerca de tales asuntos. El creyente debe pagar impuestos, aquí Jesús enseña que el pago de impuestos es fundamental, deja ejemplo de la obligación con el estado, esto está claro que tanto Jesús como Pablo enseñaban acerca del pago de impuestos al imperio Romano, un estado corrupto, malvado y éticamente repulsivo.

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EL CRISTIANO DEBE ORAR POR LAS AUTORIDADES.
En 1 Tim. 2:1 encontramos que es necesario orar por las autoridades civiles, ya sea que sean oficiales cristianos ó paganos. El escritor de este párrafo dice lo siguiente: estoy frecuentemente frustrado que critican a los oficiales del gobierno constantemente, pero que casi nunca oran por ellos. Dios puede utilizar la oración eficaz en las leyes del estado ó llevar a un oficial del gobierno a Jesucristo. La crítica constructiva y el llamado a la responsabilidad debe ser equilibrada, con la oración ferviente y perseverante.

LA PARTICIPACIÓN DEL CRISTIANO EN EL GOBIERNO Y LA POLÍTICA.
El aumento en la participación en el gobierno y la política tiene graves peligros para el cristiano. Para proveer el impacto máximo hacia la justicia en el gobierno se necesita una perspectiva apropiada y equilibrada; para esto requiere deshacernos de lo que Chuck Colson llama una perspectiva ilusionada del poder político, algunos cristianos creen que si pueden unir un bloque cristiano para votar se puede establecer el reino de Dios en la tierra.

El bien externo y limitado que puede lograr el poder político, no se debe confundir con el bien interno e infinito producido por la gracia de Dios.
Lo que debe buscar el cristiano en el gobierno es justicia no poder.

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EL ROLL DE LA IGLESIA.
La Biblia no tiene ningún mandato ni tampoco se puede sacar una inferencia lógica para participar en la política como iglesia local, no hay evidencia de que la iglesia primitiva halla participado en la política.
Además la iglesia local carece de conocimiento necesario para participar sabiamente en la política; y podría dañar seriamente su testimonio. La iglesia local es un cuerpo espiritual arraigado en la revelación de Dios. Los cristianos debemos participar individualmente en el campo político, pero la iglesia local estará en peligro si lo hace.

CONCLUSIÓN.
Algunos cristianos creen que la iglesia local no ha sido ordenada como un cuerpo político, pero que los individuos han sido encargados con esa responsabilidad, y por lo tanto la participación colectiva seguramente puede impactar la política y el gobierno.
Los cristianos caminan sobre una cuerda floja entre entender el deber cristiano hacia el estado para mayor justicia. Las dos esferas de la vida cristiana la Iglesia y el Estado deben estar en equilibrio. Cada una tiene una tarea divina; ninguna debe traspasar la responsabilidad de la otra.