Cuando en 1816 ocurre la capitulación, los insurgentes llevaban cuatro años, desde 1812, ocupando Isla de Mezcala, en Lago de Chapala. Desde el Fuerte que construyeron habían logrado salir victoriosos de decenas de encontronazos con el ejército realista que, enviado desde la intendencia de Guadalajara, tenía una base militar con mil 200 hombres en Tlachichilco, pueblo de la ribera cercano a la isla.
Manchas “color rosa salmón”, “rojo tornasol” y “verde pulverulento” reflejan el daño "irreparable" sufrido en 50% del monumento debido a que la empresa Marina, Restauración de Monumentos usó ácido nítrico para limpiarlo pese a que esta sustancia se dejó de usar para estos trabajos desde 1950 por su efecto corrosivo.