ASISTO.
EJERCICIO DE REFLEXIÓN
¿Qué pasaría si tuvieras un hijo de dieciséis años que te dijera que va a venir a la iglesia por última vez, y que luego va a hacer su maleta para irse a otro lugar? ¿Qué pasaría si a media noche se te aparecerá un ángel y te dice: “Puedes tocar el corazón de tu hijo si haces exactamente lo que te digo? Entra en la bodega de la iglesia y busca una vieja caja de ladrillos de plástico, reales o madera. El domingo predica un mensaje en torno a este único punto: Cristo vino para construir un puente para el desconectado. Durante toda la predica debes de construir un puente usando los ladrillitos”. El ejemplo es exagerado y nada probable. Pero estamos suponiendo y creo que si eso realmente ocurriera no me imagino una respuesta como esta: “Lo que pasa es que no soy bueno con las ayudas visuales”. Tampoco diríamos:
“No puedo hacer eso en mi iglesia porque tendría que sacar el pulpito”. Si realmente creyeras que por salir de tu zona de confort un domingo por la mañana lograrías impactar y alcanzar el corazón de tu hijo, lo harías. Sino creo que nos debemos dedicar a otra cosa.
Ahora no perdamos de vista esto. La próxima vez que prediquemos, la hija o el hijo de alguien podrían entrar en el templo y sentarse en la parte de atrás para dar a las cosas de Dios una última oportunidad. Y bien podría ser que en alguna parte de la ciudad algún papá o mamá estén orando como locos para que algo significativo suceda en el corazón de sus hijos. Yo sé que cada uno de nosotros estaría dispuesto a hacer algo nuevo e inclusive hacer cosas insólitas
para ganar el corazón de su hijo o su hija. ¿Qué estarías dispuesto a hacer para ganar a la hija o hijo de otra persona?
En nuestra búsqueda por desarrollar un estilo eficaz, necesitamos hacernos dos preguntas constantemente:
1. ¿Qué es lo que puede funcionar?
2. ¿Qué es lo que puede funcionar para mí?
La primera pregunta nos mantendrá buscando nuevos principios y métodos de comunicación. Te llevara a preguntarte por qué ciertos predicadores son tan atrayentes y por qué otros no. Nos mantendrá abiertos a nuevas ideas, Te mantendrá siendo un aprendiz en el campo de la comunicación para toda la vida.
La segunda pregunta nos motivara a evaluar y hacer ajustes en nuestra entrega constantemente
Howard Hendricks Dice:
LA EXPERIENCIA NO NOS HACE MEJORES,
SOLO LA EXPERIENCIA EVALUADA NOS HACE MEJORES.
AL GRANO:
1. Ser tú mismo no es una excusa para los pobres hábitos en la comunicación.
2. Sé tú mismo. Pero llega a ser el mejor predicador que tú mismo puedas llegar a ser.
3. Pregúntate constantemente: ¿Qué es lo que funciona? ¿Qué es lo que realmente funciona para mí?
Chuck Swindoll dice:
Sepa quién es usted.
Acepte quién es usted.
Sea quien usted es.