La persona religiosa es la que establece una relación con la divinidad que le permite ahondar en lo más profundo de su espiritualidad y desde ella abrirse a la trascendencia, al resto de las personas y a todo lo que existe en el universo
Todo ser humano goza de todos los derechos y debe ser respetado como tal justamente porque Dios lo ha creado como un ser libre e inteligente y como hijo de Dios, y lo llama a participar de la felicidad plena junto a Él.